La marca cuenta en su portfolio con botellas que alcanzan los miles de euros
Se trata de una de las bebidas espirituosas más exclusivas del mercado actual, no solo por su precio y sus reconocibles botellas realizadas artesanalmente, también por lo exclusivo de sus licores: tequilas y mezcales cuya receta, diseñada al milímetro, esconde la esencia de quienes lo producen y ofrece una visión de estas bebidas como pocas veces se ha visto.
Fundada en 1997 en Guadalajara, Jalisco, por Arturo Lomelí, -quien estaba determinado a crear un producto tan exquisito como la tierra de la que proviene-, Clase Azul es una casa de lujo mexicana conocida por sus exquisitos destilados, ahora disponibles en más de 80 países. La empresa está profundamente comprometida con la artesanía y apoya a la comunidad artesana mexicana a través de su Fundación Causa Azul, una organización sin fines de lucro dedicada a colaborar con distintas comunidades para mejorar su calidad de vida y preservar el arte popular mexicano como parte de la herencia y legado cultural del país.
Así, la esencia de toda esta tradición mexicana se imprime en cada una de sus botellas, todas ellas cuentan historias, tienen horas de trabajo manual detrás y sin duda son el reflejo de la zona en la que se cultiva el líquido que lleva dentro. Sus precios oscilan entre los 150 y los miles de euros para sus ediciones limitadas más exclusivas.
Aunque la empresa cuenta con una historia de más de 25 años, en España se hizo bastante popular después de que el cantante mexicano Peso Pluma regalara una de estas exclusivas botellas de Clase Azul a Broncano, en su paso por La Resistencia. Un hecho que poco tardó en hacerse viral, pues la botella que el cantante llevó como regalo es una de las más exclusivas de la marca. Se trata de su tequila reposado, uno de los más premium de la gama y cuyo precio de venta actual es de 270 euros en tiendas como la zona gourmet de El Corte Inglés. Su botella está pintada a mano y el tequila que contiene se añeja durante ocho meses en barricas de whisky americano para obtener un sabor único a vainilla y avellana, con notas de clavo, canela y hasta miel de agave, tal y como cuentan desde la propia marca.
Mezcales de lujo
Pero en Clase Azul no solo es famoso el tequila, sus mezcales también son grandes protagonistas y cuentan con 3 variedades diferentes, uno de ellos, la última incorporación: Clase Azul Mezcal San Luis Potosí acaba de llegar al mercado y promete causar sensación entre los apasionados de esta bebida. La nueva referencia se suma así a Clase Azul Mezcal Durango y Clase Azul Mezcal Guerrero, cada mezcal se inspira de un estado mexicano en particular y esta última entrega ofrece un tributo a San Luis Potosí, un estado impresionante y culturalmente rico en la Mesa Central Mexicana, donde las comunidades productoras de mezcal emplean métodos que han sido transmitidos de generación en generación por más de dos siglos.
Se produce a partir del agave verde (Agave salmiana), una variedad nativa de las laderas y planicies semidesérticas de la región, criado a una altura de unos 2.000 metros sobre el nivel del mar. El mezcal se produce en Estación Ipiña, una pequeña comunidad con cerca de 250 habitantes, en la que alrededor de un quinto de la población está involucrado en la producción de mezcal. «Estamos contentos de presentar un destilado que está enraizado tan profundamente en la historia y paisajes de su lugar de origen. La sabiduría generacional protegida por la comunidad productora de mezcal en Estación Ipiña, San Luis Potosí ha dado origen a un mezcal distintivo. Sus notas de aroma y paladar reflejan la artesanía tradicional y capturan la esencia del agave utilizado en su producción», cuenta Viridiana Tinoco, Maestra Destiladora de Clase Azul México.
En su proceso tradicional se incluye la cocción al vapor en hornos abovedados de mampostería, molienda con molino chileno y una doble destilación en alambiques hechos con cobre; todos métodos tradicionales que contribuyen a su perfil exquisito. Este mezcal presenta notas aromáticas de agave cocido, caramelo, chile verde, frutos dulces, pasto recién cortado y flores silvestres, y una embocadura herbal con matices de caramelo, cáscara de lima y clavo con un retrogusto mineral y especiado.
El color rojo de la botella rinde homenaje a los huachichiles, nómadas de los paisajes desérticos de San Luis Potosí. Traducido del náhuatl, su nombre significa «cabezas pintadas de rojo», pues eran conocidos por ataviarse con pigmento rojo, emulando el plumaje del pinzón, un guardián venerado en su tribu. Esta nueva referencia está disponible en formato de 70cl. y cuenta con un precio de venta en tienda 495 euros. Aunque las variedades de Clase Azul también pueden disfrutarse en algunos de los hoteles y restaurantes más exclusivos de España como Four Seasons Madrid, Mandarin Oriental Ritz Madrid, Kabuki o el afamado Leña de Dani García.
En 2022, la empresa también abrió su primer destino en Los Cabos, una de las zonas más exclusivas de México donde los visitantes pueden descubrir las propuestas de su restaurante, La Terraza, coctelería en El Bar, una Boutique, una experiencia inspirada en Omakase y hasta una experiencia de cata inmersiva, A Taste of Culture.