FETEIA-OLTRA, impulsa junto con CLECAT nuevas iniciativas con el objeto de lograr una solución a la situación de extrema gravedad existente en el mercado de transporte marítimo de mercancías. Además, ha puesto en marcha también una encuesta para objetivar el problema.
La situación del transporte marítimo de mercancías, lejos de mejorar, está tendiendo hacia una cronificación de los problemas generados, especialmente los costes de transporte de los contenedores, un nivel récord de falta de fiabilidad y una menor oferta de servicios.
Según informa en nota de prensa, las actuaciones de los transportistas marítimos, resultantes de su estrategia de gestión de la capacidad de prestación de servicio, les han permitido adquirir un enorme poder de mercado y potencia financiera que ahora aprovechan para ejecutar políticas de integración vertical y expulsar a los transitarios independientes en el mercado. Estos nuevos movimientos están perjudicando a los cargadores y a los consumidores finales debido a la restricción de la elección de servicios, de modo que el impacto negativo se extiende ya sobre el conjunto de la economía y más directamente sobre los precios que la ciudadanía debe satisfacer.
Desde FETEIA-OLTRA siguen trabajando intensamente con el objeto de dar solución a la grave situación planteada, bajo la coordinación de CLECAT (Asociación Europea de Servicios de Reenvío, Transporte, Logística y Aduanas). En este sentido, se ha realizado una nueva solicitud a la Comisión Europea para que utilice urgentemente sus facultades de investigación sobre el grado de concentración, consolidación, coordinación y cartelización en los mercados de transporte marítimo de contenedores.
También han solicitado que se investigue urgentemente, con arreglo a las normas de competencia de la UE y en el contexto de la revisión del Reglamento de exención por categorías de los consorcios (CBER), los efectos en el mercado de esta exención, la integración vertical, la consolidación y el control de los datos de clientes. Para FETEIA-OLTRA, en la situación actual resulta evidente que el CBER no solo no cumple el objetivo para el que fue concebido, sino que genera distorsiones en el mercado que resultan perjudiciales para el conjunto de la economía, pues se reducen las opciones de servicio y la oferta existente.
Considera que actualmente se están experimentando los problemas generados por la situación de oligopolio existente, por lo que resulta necesario actuar con agilidad y determinación para corregirla.
Desde la Administración estadounidense se están llevando a cabo múltiples actuaciones que buscan garantizar una libre competencia entre los diferentes actores en el mercado. La Comisión Europea debería seguir este ejemplo y realizar un escrutinio de todas las prácticas llevadas a cabo por las compañías navieras durante los últimos meses y tomar las acciones necesarias para recuperar la libertad de mercado.